España sufren aproximadamente 800.000 personas de Alzheimer, así lo afirma un meta análisis publicado en la revista Neurology de la Academia Americana de Neurología.
El meta análisis consistió en revisar el grado de eficacia para la prevención del deterioro neurocognitivo demostrado por tres grupos de actividades, de tipo intelectual, físico y social. Para ello se seleccionaron 38 estudios previos realizados por investigadores de todo el mundo. Involucraban a un total de 2 millones de participantes que no padecían demencia al comienzo del trabajo y fueron objeto de seguimiento durante al menos tres años.
«Los estudios realizados hasta ahora han demostrado que hay varias actividades de tiempo libre que se asocian con numerosos beneficios para la salud, de la reducción del riesgo de cáncer a la de la fibrilación atrial. Y también están vinculadas a una percepción más positiva del bienestar personal por parte del individuo», explica el Dr. Lin Lu, del Sexto Hospital Universitario de Pekín (China) y uno de los autores del estudio.
Las actividades intelectuales, en concreto, se relacionaron con la reducción más importante del riesgo neurodegenerativo, un 23%, identificando siete de ellas:
- Lectura o escritura creativa.
- Ver series o películas.
- Escuchar la radio.
- Jugar a juegos.
- Tocar un instrumento musical.
- Usar el ordenador.
- Realizar manualidades.
En cuanto a las actividades físicas, se relacionaron con un descenso del 17% de los casos de demencia. Entre los tipos de ejercicios saludables recomendados se apuntaron los paseos, el running, la natación, el ciclismo, el uso de máquinas de entrenamiento en el gimnasio, el deporte competitivo, el yoga y el baile.
Finalmente, las actividades sociales se definieron como aquellas que implicaban mantener lazos comunicativos con otras personas, y suponían la mengua más discreta de este riesgo, con solo un 7%. Se trataría de la participación en clases para adultos, en clubes sociales, en voluntariado, en congregaciones religiosas, y las visitas a familiares y amigos.